Cuando hablamos de participación muchas personas tienden a creer que se trata de un estado al que se llega en un momento determinado como un interruptor que pasa de estar apagado a estar encendido.
Incluso hay quien cree que para participar hay que pertenecer a un organismo legalmente constituido (asociaciones, clubes, comité de solidaridad...) o integrarse en estructura formal (consejo escolar, foro juvenil…).
De todo ello hemos comenzado a hablar en el cuarto módulo de la Escuela de Facilitación Juvenil con enfoque Comunitario y lo hacemos desde un punto de partida claro:
• La participación requiere querer, saber y poder. Por tanto, y como primer paso, es necesario trabajar con el grupo de jóvenes “qué es y cómo entendemos la participación”, para luego poder
profundizar en su diseño, desarrollo y aplicación.
• Y además, a participar se aprende participando. Ello implica que las propias técnicas y dinámicas propuestas para trabajar los contenidos deben ser participativas, para que los/as chicos/as
experimenten en primera persona la participación.“Aprender es experimentar, todo lo demás es información.”
Albert Einstenin
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